¿Dónde meter parte del dinero que vas ahorrando? ¿Dónde poner pequeñas sumas?
(Artículo original de mi newsletter «El emprendedor Feliz»,
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Es una pregunta que muchos emprendedores me han hecho cientos de veces.
¿Dónde meto parte de lo que gano?
¿Dónde es mejor invertir?
¿Qué hago con estos 300 euros que me sobran todos los meses?
Y es normal. El dinero es un activo que, bien usado, puede hacerte ganar más dinero. Es la quintaesencia del capitalismo: usar capital para ganar más capital. Usar dinero para ganar más dinero. Ahora bien, no es fácil. Nada fácil. Y menos aún cuando hablamos de pequeñas sumas de dinero ya que es difícil sacar una rentabilidad que haga la diferencia con pequeñas aportaciones a no ser que empieces muy pronto en la vida y tengas mucha paciencia para llegar a ver cómo terminan sumando una diferencia notable.
Yo aconsejo dos cosas y el artículo de hoy va sobre la segunda de estas dos.
1- Ahorrar hasta tener una cantidad que te permita llevar a cabo una operación de cierto calibre, como comprar una vivienda para venderla.
2- Invertir en el propio negocio.
Y digo invertir en el propio negocio como digo también invertir en ti mismo, como punta del iceberg de tu negocio.
Antonio es un cliente que lleva años conmigo. Tiene una empresa muy exigente. Tiene que tratar mucho con clientes y eso es de las cosas que más quema. Cuando comenzamos a trabajar su hartazgo era palpable y me propuse cambiar eso, sin embargo en la primera sesión ya me dijo que le gustaría mover 100 «eurillos» al mes de alguna forma. Yo le respondí: «Me parece bien, 50 euros para una masaje relajante al mes y otros 50 para pasar una mañana en un spa».
Él me contestó: «No, no. Me refiero a invertirlos para ganar un poco más de dinero».
Le dije: «Te he entendido perfectamente».
A regañadientes… me hizo caso.
A los pocos meses comenzó a trabajar mejor, a tratar mejor a sus empleados y a tratar con más energía a sus clientes. La rentabilidad de su empresa subió un 2% al cabo de 6 meses sin cambiar, aparentemente, nada más. No obtuvo una rentabilidad del 2% de esos 100 euros pero sí la consiguió de los 12000 que facturaban normalmente al mes. Haz las cuentas.
Otro cliente que tuve comenzó a destinar un montante similar a mejorar su apariencia. Se apuntó al gimnasio y contrató un entrenador personal. Comenzó a llevar siempre el pelo bien cortado y empezó a vestirse mejor. Él mismo dijo que su negocio se había disparado desde que comenzó a invertir de esa manera en sí mismo.
Como ves, esto de las inversiones se puede enfocar de muchas maneras.
Es como la vez que un cliente mío me dijo que estaba metiendo cada mes 200 euros en la bolsa mientras calzaba unos zapatos terribles, viejos, sucios y descoloridos.
Lo primero es lo primero.
Invertir está muy bien, por supuesto que sí, pero hay muchas formas de conseguir un buen retorno de la inversión.
¿Necesitas más ideas? Apunta, te dejo una lista por si no sabes qué hacer con esos 100 o 200 euros que te sobran al mes:
-Libros para tu desarrollo personal.
-Cursos y formaciones.
-Imagen personal.
-Ropa de calidad.
-Un buen perfume.
-Zapatos.
-Invitar a algún cliente a comer o cenar.
-Un buen masaje relajante.
-Un entrenador personal.
-Un regalo para tus mejores clientes.
-Un regalo para tu mejor empleado.
-Invitar a comer a tus empleados.
-Decoración para tu despacho o local.
-Inversión en elementos de la empresa (maquinaria, mantenimiento, reparaciones, etc).
-Un sastre para mejorar la ropa que ya tienes.
Hay muchos más. Piensa tú en cómo podrías invertir mejor en ti o tu negocio una suma modesta de dinero y mándamelas respondiendo a este correo. Te leeré encantado.
Espero que te sirva.