La fortaleza brota de las cosas importantes.
De lo que te importa.
Quizá lo que necesitas es encontrar algo así en tu vida antes.
Primero busca algo que tenga significado para ti.
Es ahí donde encontrarás la fortaleza después.
Nadie puede volverse fuerte entre cosas sin importancia.
Entre días llenos de mediocridad. Entre horas sin el más mínimo riesgo.
El corazón que va siempre a sesenta y cinco pulsaciones por minuto nunca se fortalece.
FUERZA Y PAZ.