Todos funcionamos por esperanza.
En un grado u otro.
Nos demos cuenta de ello o no.
Nos guste la idea o no.
Y si no, dime: ¿por qué te levantas cada mañana?
¿Porque tienes facturas que pagar, compromisos y responsabilidades?
¿Y qué? No atiendas todas esas cosas.
¿Qué más da?
Si las atiendes es porque crees que merece la pena hacerlo.
Porque crees que un día todo este esfuerzo tendrá un sentido y merecerá la pena todo el esfuerzo y tiempo invertido.
Si no fuese así, ni tú ni yo ni nadie podríamos con la vida.
Y sería lo más normal del mundo.
23/1000
FUERZA Y PAZ.
Pd: Tengo una newsletter semanal que es de lo mejor que hay, modestia aparte. Y es gratis. Suscríbete AQUÍ.