Escribe C.S. Lewis que todo el mundo dice que el perdón es una hermosa idea hasta que tienen algo que perdonar.
Es cierto.
Creemos que si perdonamos nos hacemos vulnerables y entonces usamos el rencor y el resentimiento como una especie de armadura protectora. «Si le perdono, me lo volverá a hacer», me han dicho mil veces en todos estos años.
¿Qué tendrá que ver? Es como si dijese «si pago la multa que me pusieron ayer entonces me pondrán más». No tiene sentido.
Primero: perdonar y reconciliar son dos cosas distintas que no siempre van de la mano. Es más, a veces no conviene en absoluto que vayan de la mano.
Y segundo: ¿estás seguro de que no perdonando no sales peor parado tú que el que te ha ofendido?
¿Prefieres un corazón supuestamente a salvo o un corazón libre?
8/1000
FUERZA Y PAZ.
Pd: El perdón es uno de los temas que solemos tratar en mi mentoría grupal. Aquí tienes información sobre este servicio, por si te pica la curiosidad.