Siempre puedes empezar de cero.

Cuando quieras, tan siquiera tienes que esperar a caer del todo para hacerlo.

Aunque en la mayoría de los casos es lo mejor.

La vida puede ser como ese oleo, enorme, lleno de trazos. A simple vista puede parecer que está perfecto, pero a veces, ves algo que no cuadra. Una línea o un color que no pega. Algo que desentona.

Y no puedes mirar la pintura tranquilo porque tus ojos van ahí. Siempre.

Es como una astilla en el dedo que más usas.

Y encima sabes que no hay forma de hacer retoques. Como quieras arreglarlo lo rompes del todo.

Ya luego piensas que puestos a romper, mejor rehacer desde cero.

Y ahí todo va mejor, porque claro, ya sabes lo que NO tienes que hacer.

Porque claro, no temes empezar de cero otra vez si es necesario.

Porque claro, has perdido el miedo.

Porque claro, has empezado a vivir. De verdad.

PASAD UN BUEN LUNES QUERIDA TRIBU.

PAZ.

 

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