En los primeros hervores de una nueva relación sentimental presenciamos las versiones más cuidadosas y educadas que se verán mientras esa unión dure.
En tu mano está no mirar a otro lado y aceptar las verdades inherentes que se aprecian en ciertos momentos clave al principio.
Lo que se ve (bueno y malo) en una versión educada no es más que una ventana al futuro (bueno o malo).
Si se tira un pedo ahí sólo es la antesala de mucho más que vendrán y en mayor frecuencia y hedor. Si se queja entonces, se quejará en avalancha después. Si ronca primero rugirá después.
Lo malo y lo peor se ve mejor ahí.