Deja de mirar lo que no tienes y otros sí.
Aunque sea durante una temporada.
Quizá así seas capaz de volverte y disfrutar lo que sí tienes… y quizá otros no.
Te digo lo que me dijo uno de mis primeros clientes millonarios:
«Tú tienes a tu madre viva aún. Yo daría toda mi fortuna por poder abrazar a mi madre otra vez, aunque fuesen 10 segundos».
Nunca he escuchado a nadie decir que daría a su madre por abrazar 10 segundos un cheque de 100 millones de euros.
Por ejemplo.
FUERZA Y PAZ.