La única forma de que las cosas puedan ir a mejor es, paradójicamente, asumir la posibilidad de que puedan ir a peor.
Solo puedes comerte un bistec poniéndolo al fuego y haciendo posible que pueda chamuscarse.
Solo puedes disfrutar de un baño en la playa haciendo posible que puedas morir ahogado arrastrado por la resaca.
Solo puedes ganar dinero invirtiendo haciendo posible que puedas perder ese dinero.
La valentía es más grande cuanto más grande y posible sea el dolor.
Es la hostia.