No puedo decirlo más claro: Para mí la impaciencia es un rasgo inequívoco de la debilidad.
No puedo concebir la idea de llamar débil a la persona paciente como no podría llamar débil a la persona valiente.
Por lo que a mí respecta, si pudiera darte un consejo te diría: desarrolla un auténtico y voraz asco por la impaciencia.