Hay dos tipos de personas:
- Las que te dan energía.
- Las que te la quitan.
Pero antes de pensar en qué personas de tu entorno te quitan energía, lo que tienes que hacer es preguntarte en qué categoría estás tú. Porque es muy común ver al cretino hablar de cuántos cretinos hay.
Cuando estés seguro de que no robas energía a los demás podrás poner tu vida en orden y no permitir que los que sí lo hacen se acerquen a ti.
Y recuerda: sé muy celoso de tu energía. Cuídala y protégela.