¿Lo que haces y lo que dices que quieres conseguir están en sintonía?
Porque en la mayoría de casos no es así.
Si no encuentras una supercoherencia entre pensamiento y acción lo que encontrarás a cambio será el caos.
La desorientación. El choque brutal entre expectativa y realidad.
El «¿cómo coño he llegado hasta aquí?».
La disciplina es coherencia. Concordancia. Consecuencia.
Quiero X y hago por conseguir esa maldita X.
Quiero 2 y hago 1+1.
Conviértete en una línea recta entre A y B.
FUERZA Y PAZ.
Joan Gallardo.