Pensar es maravilloso.
Siempre que no te tomes demasiado en serio lo que piensas.
Al menos durante mucho tiempo.
Pruébalo, no te apegues a lo que piensas hoy y verás lo diferente que puedes llegar a ver las cosas dentro de poco.
Los que acusan de falta de criterio son el espejo donde mirar lo que no quieres llegar a ser jamás.
Ni las piedras se quedan siempre en el mismo sitio. No lo hagas tú.
Paz.