Rechazo el logro, si viene acompañado de demasiado estrés.
No lo quiero.
Porque no hay nada que mejore una vida tranquila. Una vida sencilla.
Nadie tiene una oferta mejor.
No quiero consumirme buscando el éxito. Porque si lo hago no será éxito.
¿No recuerdas cuál era el éxito? Una vida feliz. En paz. El sosiego.