Quien se duerme con esperanza se despierta con verdadera vida.
Abre los ojos y siente un impulso. Un pulso.
Ve la mañana y siente el sentido. Cierto significado.
Y así, se siente un renacer.
Una nueva oportunidad, que es solo por las ganas de que sea.
Quien se duerme sin esperanza no despierta del todo.
Pero tampoco descansa sino deambula. Le pesa el suelo. Y el aire.
No puede abrir los ojos del todo y no puede ver bien.
Cuidado con quien te acuestas.
Con probabilidad, estará ahí cuando levantes.
Para bien y para mal.
FUERZA Y PAZ.
Y ESPERANZA.