Siguiendo el camino del perdón y del amor (felicidad y libertad) os propongo otra forma de tratar con vuestros haters.
Por favor, no te convenzas de nada, sólo renuncia a tu ego durante un rato y piensa en la posibilidad de otro camino.
No digo que ante el próximo insulto o falta de respeto digas «hey te perdono» (o sí si lo necesitas), hablo de perdonar en silencio, lo que se dice con la boca no llega a la altura de lo que se siente con el corazón.
No juzgues, no te enfades y si lo haces perdónate a ti primero y al hater después.