Como siempre que hablo de algo, lo hago poniendo el ejemplo que mejor podríais creer: el mío.
Os cuento cómo a raíz de mis propias experiencias descubrí mi propio sentido y significado del PERDÓN.
De mí hacia otros y de otros hacia mí.
Espero que os ayude en algo, pero que no os convenza, buscad vuestro propio significado y deseo que notéis la liberación que sentí yo al llegar a mis propias conclusiones.
Un abrazo muy fuerte.