Buenos días tribu.
Pensaréis «qué cojones tiene que ver el minimalismo con el whatsapp»…
Ya os conté que lo mejor del minimalismo es lo que viene después de terminar con las cosas materiales de nuestra vida.
La simplificación en todos los campos posteriores suponen un nivel superior de paz y tranquilidad. Para mí, lo que merece más la pena del minimalismo.
Gracias al minimalismo me cargué fulminantemente el whatsapp. Y no lo volveré a instalar. No lo he echado de menos ni un minuto.
Más tiempo, más energía, más tranquilidad, interacciones personales más humanas y bonitas, menos ruido… sólo he visto cosas buenas desde que dejé whatsapp.
De media pasamos unos 45 minutos al día en whatsapp… una locura. Con eso leeríamos un libro a la semana o escribiríamos un post diario para un blog… por ejemplo.
Vale la pena detenerse un momento y pensar en el uso que le damos a esta famosísima aplicación.
Nos vemos mañana, seguro. PAZ.