Buenos días tribu.
Ya estoy recibiendo las primeras fotos con bolsas de ropa que se marchan para dejar espacio libre en casa.
Empecemos a practicar el desapego y a romper la relación
«yo-soy-mis-cosas» que tan arraigada está en nuestra sociedad.
Veremos también cómo vender nuestra ropa usada en el mercado de segunda mano es también una opción. Sobre todo para aquellos que pasan alguna estrechez para llegar a final de mes.
Tenemos opciones, muchas opciones. Juguemos bien.