En lugar de pensar que no eres bueno en algo piensa mejor en POR QUÉ CREES QUE NO LO ERES.
Tu única resistencia lleva tu nombre y apellidos.
Recupera los sueños que tenías de niño. Te los arrebataron la sociedad, la educación y el sistema… CON TU PERMISO.
Jugaremos a decir que los silenciasteis con ánimo de encajar.
De niño te sientes tan único que no paras a pensar si hay alguien más en el mundo.
Mira si eras sabio y espiritual.
Un día te enseñaron que eso era ser egoísta y te hiciste amigo de tu ego para sobrevivir en ese caos programado a lo industrial.
Es hora de dar un beso a tu ego y dejarlo en segundo plano.
Quieres la sabiduría de la inocencia.
Y no hay que estirar la mano para conseguirla. Sólo hay que reconectar con la fuente.
Ahí donde tenías todas las respuestas.
Inocencia, Espíritu y amor.
Es decir: FELICIDAD.