Buenos días tribu.
¿Dónde hemos perdido nuestra introspección?
¿Cuándo hemos renunciado a tal vital ejercicio?
Estamos flojos en ese músculo.
Y no puede ser. Estamos poniendo el foco, nuestra mejor condición, nuestro esfuerzo… en el lugar equivocado. Y el bueno está justo al lado.
Queda poco, gracias por estar ahí.
Nos vemos mañana, seguro. PAZ.