¡BUENOS DÍAS TRIBU!
Hoy os contaré cómo conseguí rechazar para siempre la pereza y la apatía. De esta forma seguimos con el episodio de ayer y os doy una clave (que puede que no sea universal) que me funcionó en uno de los peores momentos de mi vida.
Deseo que os llegue y lo uséis.
Muchas gracias por estar ahí una vez más. Queda poco, pero haremos mucho.
Nos vemos mañana, seguro. PAZ.